El objetivo es mejorar la eficiencia del sistema para prevenir los episodios de violencia doméstica, generar conciencia en la población acerca de la importancia de denunciar este tipo de situaciones de manera temprana, y preparar adecuadamente al sistema en su conjunto para acoger a las víctimas.

Avanzar en la solución de nudos críticos que dificultan el tratamiento oportuno de los casos de agresión a mujeres y fortalecer el trabajo de prevención y persecución de los delitos de femicidio, fueron dos tareas que el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, encomendó a las policías para enfrentar el fenómeno de la violencia de género, que en 2015 llegó a 45 casos de femicidio y en 2016 la cifra ya lleva 11 víctimas fatales.

En la oportunidad, la autoridad se reunión con la Jefa de Zona de Prevención y Protección de la Familia, general Marcia Raimann, y el jefe Nacional de Delitos contra los DDHH y las Personas, prefecto inspector de la PDI, Sergio Claramunt, con quienes fijó una agenda de trabajo destinada a plantear soluciones de corto y largo plazo frente a los problemas que enfrenta la lucha contra la violencia intrafamiliar, especialmente contra las mujeres.

“Tenemos un trabajo a muy corto plazo de hacer una agenda corta para lograr un impacto en estos temas, buscar cuáles son las causas y los nudos críticos para entregar una respuesta sobre (las medidas) que vamos a hacer (…) El trabajo tenemos que hacerlo rápido y también trabajar a largo plazo, qué podemos hacer, involucrar a actores de otros estamentos sociales”, sostuvo la general Raimann.

A su vez, el prefecto Claramunt indicó que “se dieron tareas para ambas policías, colocamos varios focos en los que debemos hacer para ver qué soluciones podemos tener rápidamente, para que las víctimas pierdan el temor a denunciar”.

Durante la primera semana de abril, la Subsecretaría del Interior y las policías evaluarán el conjunto de nudos críticos levantados y la forma en que se abordarán, a través de medidas concretas enfocadas en la identificación temprana de factores de riesgo asociados a violencia intrafamiliar física o psicológica y la forma en que las instituciones acogen a quienes han sido víctimas.

Esta labor podrá involucrar la participación de otras instituciones vinculadas a los proceso de investigación y sanción judicial, como el Ministerio Público y el Poder Judicial con el fin de que exista una oportuna coordinación desde la  perspectiva del trabajo que desarrolla el Ministerio del Interior.